Durante el derrotero en la jornada laboral se presenta infinidad de temas casuales que por ser tan cotidianos no son tomados en cuenta para un ensayo fotográfico, dejando dormir el talento innato que reposa en cada uno; recién reparamos en éstos cuando otro tomo la iniciativa de trabajar su composición en la toma ya expuesta.
Los ventanales integrados al diseño estructural que lo cobijan y acorde con la complexión esquemática de la arquitectura, ofrece un sinfín de ensayos fotográficos dentro del eje de la perspectiva visual que enfocamos a través de la lente en la cámara fotográfica. Basta con colocarse a uno o dos metro de la edificación, mirar hacia arriba y distinguir la línea conductual que nos comunique con los otros elementos conexo a está.
Los días soleados, pasado el medio día, con sus rayos incidentes cayendo sobre el piso cerámico de acabado brilloso refracta en su superficie la luz proyectando sombras de los seres que se interponen entre este y el techo. Sólo basta echarle una mirada para poderlo captar.
La simplicidad con que se suele romper los obstáculos entre dos puntos para cumplir con el cometido sirve de base para la presente toma donde se lleva a cuesta un gran costal de papel para su posterior reciclaje.
Sólo es cuestión de proponerse ensayar lo visto para capturarlo en la toma pensada.
Composiciones
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