Como ya es hábito en los peruanos, cada 18 octubre, mes
morado, nos damos cita para acompañar el anda del Señor de los Milagros en su
primer recorrido por las antiguas calles limeñas; es acompañado por un mar de
gente que cumple así el tradicional recorrido por los principales distritos
capitalinos.
Desde tempranas horas puede verse como se viene ambientando
los principales estamentos públicos que reciben y acogen el paso de las sagradas
andas del Cristo de Pachacamilla.
Con precisos trazos geométricos van dando forma,
sobre el oscuro pavimento, lo que ha de ser una hermosa alfombra confeccionada
con pétalos de flores sobre la cual pasará con paso firme la cuadrilla de la
hermandad que lleva sobre sus hombros a nuestro Cristo Morado.
Antecede su
ingreso la cuadrilla de la hermandad de mujeres sahumadoras, que a través del sahumerio
que llevan en manos, van quemando el inciencio con el que se purifica y en vuelve
de ese agradable olor ante el contemplativo paso de la sagrada anda que a si
van sumando los homenajes y honores de su pueblo creyente.