viernes, 11 de octubre de 2013

La Marinera

La marinera es el baile de pareja donde la mujer, haciendo gala de su zalamera coquetería, corresponde la airosa galantería del varón, en donde ambos exteriorizan un vivido romanticismo dual que se enamoran a través de la ejecución de su ecuánime y armonioso ritmo, que es caracterizado por el uso de pañuelos y sombrero de paja, resultado de compilación del vasto mestizaje hispano-amerindio-africano.

Debe su nombre a Abelardo Gamarra Rondó, El Tunante, quien rebautizó este baile como «marinera» en 1879, y un 30 de enero de 1986, declaran toda la interpretación, coreografía y música, dentro de sus variantes regionales, como  Patrimonio Cultural de la Nación Peruana por el Instituto Nacional de Cultura del Perú. En el 2012, el Congreso de La República Peruana, declaró el 7 de octubre como “Día de la Marinera”, conmemorando el nacimiento de Augusto Áscuez Villanueva, uno de sus principales intérpretes.

Su origen se atribuye al baile colonial llamado zamacueca, cuya raíz etimológica proviene del quechua zawani, que significa baile del día de descanso y de zamiquiqui que era el descanso campesino luego de la ardua semana de trabajo en el Virreinato del Perú, muy popular allá por el siglo XIX. El argentino Carlos Vega argumenta que la zamacueca nace en 1610 en el barrio de Malambo, indicando que es una danza de pareja suelta, picaresca y donde los bailarines usan un pañuelo en la mano. La denominación "Zamacueca" provendría de "Zamba clueca" donde la "zamba" (mujer mestiza negro/amerindio) realiza movimientos como una gallina "clueca" que ha puesto un huevo.


Lupita Fiestas y Juan Estrada 





 











 












En el artículo "El baile nacional" de su libro Rasgos de pluma (1902), Abelardo Gamarra Rondó, señala que el baile era conocido con diversos nombres antes de la Guerra del Pacífico, como «baile del pañuelito», «mozamala» y «zamacueca». Sin embargo, hasta 1879, año del inicio de la guerra, su nombre más generalizado era «chilena». Durante la época de la Guerra del Pacífico, la entonces «chilena» fue rebautizada por iniciativa del mismo Gamarra como «marinera», «baile de marinería» o «baile de la marinera», en homenaje a Miguel Grau, al monitor Huáscar y a la Marina de Guerra del Perú.

La primera marinera compuesta por El Tunante fue escrita en marzo de 1879 y se llamó "La Antofagasta", puerto boliviano ocupado por Chile en esos días, según indica Julio Rojas Melgarejo, mientras que la primera marinera compuesta para ser cantada y acompañada con piano se creó en 1893 con el nombre de "Concha de perla", letra de José Alvarado "Alvaradito" y música de El Tunante.

Abhril Arias y Juan Estrada



 
 


















 











La marinera de contrapunto o "canto de jarana" suele constar de tres cuartetas, resbalosa y fuga (puede ser más de una). Siendo un contrapunto de canto, la Marinera Limeña es improvisación pura, y es rica y compleja en su ejecución. En cuanto a los instrumentos con que se interpreta, se encuentran hoy la guitarra, el cajón y las palmas del público. En cuanto a la percusión esta era enriquecida con la presencia del tamborete, instrumento con la apariencia de una mesa. Este instrumento fue luego reemplazado por el Cajón.

Se concluye la marinera con la fuga, una suerte de exaltación que finaliza el baile en una forma muy alegre.

La marinera limeña tiene un parámetro en su canto y música, este canto fue llevado al baile ordenándolo por medio de amarres y cambios de sitios que los bailarines deben cumplir con rigor. La bailarina más famosa de la historia fue la legendaria Bartola Sancho Dávila. Los intérpretes más sobresalientes fueron Los Hermanos Ascuez, el trío Los Troveros Criollos y el conjunto Tradición limeña con el vocalista Rafael Matallana.

Jorge Beteta (3 veces campeón Nacional de Marinera) y Wayra Solano


















 













 


 
Exhibición realizada en la inauguración de la muestra fotográfica “La Marinera”, El Baile del Pañuelo en el Aire de Javier Ocampo Ponce, efectuada en la sala Luna Pizarro del Congreso de La República.

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